Las casas de acogida nos permiten poder ayudar a más.
Al no disponer de refugio físico, trabajamos con casas de acogida temporales dónde se quedan nuestros peludos rescatados hasta encontrar un hogar.
Es una experiencia única ya que permite vivir primeras experiencias de todos los que llegan, les enseñan a vivir, situaciones nuevas y darles los lujos que antes no tenían.
Las casas de acogida no pagan veterinario ni medicación, en casos que tampoco se pueda pagar la alimentación por ser especial o por la situación de la familia de acogida, también se facilitará la comida.
No podemos decir con exactitud el tiempo que se puede quedar un perro en acogida ya que depende de cada caso, algunos van muy rápido, otros en cambio cuesta un poco más.
En definitiva, si quieres ayudar pero no puedes quedarte a un perri de por vida, es una opción muy buena.
El lugar que deja tu acogido, lo puede llenar otro que lo necesite realmente.